Los últimos años de Bradley Beal es para ponerlo en el Museo de los Horrores. El escolta, tras consultar con varios médicos a lo largo y ancho del país, ha decidido operarse de la cadera para reparar una fractura. Lo cual le dejará fuera de las canchas el resto del curso.
Beal, que llegó este verano a Los Angeles Clippers como agente libre tras ser cortado por los Phoenix Suns, apenas ha podido jugar seis encuentros con el equipo angelino. Por si fuese poco, con restricción de minutos. Hace poco aprovechaba su visita a Phoenix para alabar a su nuevo cuerpo técnico dejando mal a Mike Budenholzer y Frank Vogel. «Allí no me trataban como Bradley Beal», dijo.
A sus 32 años, una lesión de cadera puede mermar sus últimos años como jugador. Y eso que, desde su salida de Washington, ya parece una porción del anotador que llegó a ser. Ni más ni menos que el líder en anotación de la liga en 2021 con 31,3 tantos de promedio. Desde entonces, su media no llega a los 20.
El exterior firmó un contrato de dos años para igualarlo con los de Kawhi Leonard y James Harden, por lo que quizás los Clippers guarden algo de fe de cara a la próxima temporada si no les golpea el presunto escándalo de Leonard.
(Fotografía de portada de Mark J. Rebilas-Imagn Images)
