Miami Heat confirma el cambio de dinámica con una victoria ante Charlotte Hornets (86-104). Una enorme desconexión de los locales en el tercer cuarto, en el que perdieron por 27 puntos de diferencia, facilitó las cosas a los visitantes. Jimmy Butler fue el jugador más destacado del encuentro.
Tras una primera parte igualada, en la que los Hornets incluso llegaban con cinco puntos de ventaja al entretiempo, todo se desmoronó tras el paso por los vestuarios. El descanso no le sentó nada bien a los de James Borrego y todo lo contrario a los Heat. Un parcial de 35-8 en el tercer cuarto sentenció el encuentro sin posibilidad de respuesta local.
En el fatídico periodo para los intereses de los Hornets, se juntaron dos cosas: el acierto en ataque de los Heat y su buena labor en defensa. Charlotte terminó el cuarto con 0 de 10 en triples y 4 de 18 en tiros de campo. Mientras tanto, los Heat lanzaban por encima del 50% en ambas estadísticas.
Jimmy Butler fue el máximo anotador del partido con 27 puntos. A él se le unió Bam Adebayo, que logró su 15º doble-doble de la temporada. También realizó una buena actuación Tyler Herro, con 19 puntos en 7 de 13 tiros de campo, incluidos 5 de 8 desde el triple. En los Hornets, tan solo Rozier, con 16 puntos y buenos porcentajes, jugó a su nivel.
En defensa de Lowry
Tras el partido, el entrenador de los Heat, Erik Spoelstra, quiso romper una lanza a favor de una de las estrellas de su equipo, Kyle Lowry. «Es el efecto magnificador que tiene sobre los demás jugadores. Eso es parte de su grandeza. Puede controlar el juego, el ritmo, hacer las jugadas propias y sentir el devenir del partido», afirmaba el técnico.
Tras perderse nueve partidos por un asunto familiar, el base aún está pendiente de encontrar el ritmo ofensivo. Ante los Hornets, terminó con 9 puntos y 6 asistencias, prácticamente toda su aportación en la segunda mitad. Spoelstra defendió a su base más allá de los números: «Con él nunca miro la línea de estadísticas», concluía.
(Fotografía por Cliff Hawkins/Getty Images)