Kentavious Caldwell-Pope podrá jugar mañana en el debut de sus Detroit Pistons ante Atlanta Hawks tras recuperarse de un esguince de tobillo, tal y como informa la franquicia. El jugador, que se perdió el último partido de pretemporada por la lesión, será el escolta titular del equipo de Stan Van Gundy.
Su presencia en la cancha se antoja muy importante para las opciones de victoria de los Pistons, ya que tendrá la difícil misión de defender a Kyle Korver. «Las dos personas a las que más odio perseguir en la pista son Kyle Korver y J.J. Redick. Son los mejores saliendo de bloqueos», reconoce el de los Pistons.
Caldwell-Pope fue el jugador que más minutos jugó a las órdenes de Van Gundy la temporada pasada y en sus dos años de carrera no se ha perdido ningún encuentro por lesión: solo se quedó sin vestirse de corto 2 veces, por decisión técnica, en sus primeras semanas como rookie.