Cam Reddish, en unas recientes declaraciones de prensa, ha reiterado que no pidió su traspaso de los New York Knicks, tal como informaron anteriormente fuentes del medio NY Post.
El alero, que ya se encuentra totalmente recuperado de su lesión de hombro, ha trabajado todo el verano en Westchester para llegar al cien por cien a la nueva pretemporada 2022. Cuando mejor lo estaba haciendo, llegó su lesión, y apenas pudo disputar 15 partidos oficiales. Sin embargo, sabe que los minutos estarán muy caros dada la gran competencia en los puestos de alero y ala-pívot respectivamente con Barrett, Randle, Fournier, Grimes y/o Obi Toppin.
«Todavía trato de averiguar mi papel, dónde encajo en el equipo… Pero estoy dispuesto a hacer lo que sea para ganar. El papel que sea. Si estamos ganando, todo estará bien para mí», admitió Cam Reddish.
Durante el verano le llegaron a colocar en unos Pistons en reconstrucción, y también en los Lakers de LeBron y Anthony Davis, ya que comparten representante. Sin embargo, Reddish continúa subido al barco de los Knicks con el objetivo de trabajar y mejorar su juego.
«Controlo lo que puedo controlar», dijo sobre los rumores de traspaso. «Así que los minutos y todas esas cosas no tienen nada que ver conmigo. Simplemente tengo que venir y hacer mi trabajo. Y trabajar tan duro como puedo a diario. Estoy disponible. Sano. Así que lo tenga que pasar, pasará», añadió.
Desde que fuera intercambiado en enero de 2022 por Kevin Knox, el alero formado en Duke pudo disputar 15 jornadas oficiales con unos guarismos de 6,1 puntos y 1,4 rebotes en poco más de 14 minutos por noche.
«Me llevó un poco de tiempo estar a tope. No pude mover el hombro durante al menos durante un par de semanas. Estuve aquí en Nueva York haciendo la rehabilitación y realizando un montón de trabajo. Pero al final recuperé mi rango de movimiento y mi fuerza, así que ahora me encuentro fenomenal», concluyó el jugador.
Thibs echa balones fuera
Reddish no parece muy del agrado de Tom Thibodeau. El técnico de los Knicks parece que tiene otras preferencias en su rotación, tales como Barrett, Fournier o Grimes; sin embargo, nunca es de los que les cierran la puerta a nadie. Solo pide una buena actitud en los entrenamientos y en pista, y la oportunidad llegará, tal como ya ha comentado en anteriores ocasiones.
«Los jugadores van a tener que ganarse lo que quieran. Tenemos una buena buena profundidad. Ahora mismo no puedo decirte quién está en mi rotación y quién no. Eso se ganará día a día. Y si alguien no está al principio, eso no significa que vaya a quedarse ahí para siempre», matizó el técnico.
(Fotografía de portada: Stacy Revere/Getty Images)