Dallas Mavericks ha confiado gran parte de su futuro a Harrison Barnes. Firmado en la pasada agencia libre con un contrato de 4 años y 94 millones de dólares, la franquicia de Texas espera que el exalero de los Warriors explote definitivamente para convertirse en una de las referencias de la NBA.
Justo en esa línea se ha expresado el entrenador del equipo Rick Carlisle, quien más allá de lo que ya conocía de su nuevo jugador, se ha mostrado realmente sorprendido por el manejo de balón que tiene.
«Creo que Barnes puede convertirse en un playmaker, pero hasta ahora no ha sido su ADN porque tampoco es lo que se le ha pedido en Golden State. Tras pasar cinco días de entrenamiento con él me encontré con que tiene un manejo mucho mejor del que esperábamos, pero vamos a tener que trabajar en esas situaciones», explica en declaraciones a ESPN Dallas.
¿Demasiadas expectativas?
Nadie va a descubrir ahora las cualidades de Harrison Barnes ni va a negar que en los Warriors su espacio era mucho menor del que tendrá en Dallas, pero eso no quita que de igual manera la exigencia vaya a multiplicarse esta temporada. ¿Podrá con la presión?