Carmelo Anthony es sin duda la gran referencia de los Knicks en todos los sentidos.
Lógicamente, para poder serlo necesita estar a un nivel acorde al que exige una competición tan dura como la NBA, y él está seguro de que a sus 31 años aún le queda cuerda para rato.
“Sin duda puedo jugar a un alto nivel durante los próximos cuatro o cinco años”, comentó el alero para ESPN tras el entrenamiento del sábado.
Aunque en este verano no hayan podido conseguirlo como quizás se esperaba, en las oficinas de los Knicks se confía en la gestión que se está realizando a la hora de dar salida y entrada a jugadores.
Y el principal objetivo que hay al final de todo ello es lograr rodear a Anthony de otros grandes talentos de la liga para configurar un equipo que acabe postulándose como uno de los grandes candidatos al título.