La temporada de los Knicks en general y la de Carmelo Anthony en particular pueden ser calificadas como “algo para olvidar”. La frustración ha imperado dentro de la franquicia, con unos resultados muy fuera de las expectativas iniciales y la estrella del equipo viviendo sus peores momentos desde que llegó a la gran manzana.
El alero tiene pendiente una reunión con Phil Jackson, en la que probablemente hablarán sobre lo ocurrido durante el año y decidirán qué sucede con el siguiente, algo que sin duda no parece tan fácil de resolver.
“Se pondrán las cartas en la mesa durante la reunión”, dijo Anthony, deseoso de que llegue la fecha para verse con el presidente de los Knicks. “Cuando estoy en la cancha, me dedico a jugar. Hago lo que siempre me ha divertido y con lo que he disfrutado. Aunque este año no ha sido tan divertido como me hubiera gustado, traté de encontrar la alegría de seguir en este deporte”.
Carmelo ha sido el gran señalado por parte de Jackson a la hora de buscar un traspaso. El ejecutivo parece dispuesto a dejar de contar con uno de sus hombres más destacados para lograr nuevas fichas en el mercado; sin embargo, Carmelo tiene una cláusula anti traspaso que le posibilita vetar esos movimientos, por lo que habrá que ver qué acaba sucediendo en el litigio con Jackson.