Tan capaz de ser uno de los máximos anotadores de su equipo en un partido, como de pasar casi desapercibido al siguiente, Terrence Ross tiene ante sí la misión de ganar en consistencia para que su papel en Toronto Raptors vaya creciendo en igual medida.
Hasta el momento, con tres partidos jugados, el escolta de los canadienses ya ha dejado ver ambas caras de la moneda. El primer día se quedó en solo 5 puntos, marca eclipsada dos noches después al marcharse hasta los 21 contra Boston Celtics.
Cuestionado justo por esa irregularidad, Dwane Casey, entrenador de los Raptors, explica que aunque le gustaría que su pupilo llevase una línea más continua de juego, entiende a su vez que aún está en periodo de aprendizaje.
«A veces es frustrante. Le ves bien, ves lo que puede hacer y después te da algo de ‘chatarra’. Pero esto forma parte de ser joven, parte de estar en la búsqueda de su sitio en la liga. Tendrás noches como esas, pero cada vez son menos», señala a Windsor Star.