Todo apunta a que los Cleveland Cavaliers comenzarán el curso 2025-26 con Lonzo Ball como único base puro. Darius Garland, que ya jugó los pasados playoffs tocado, tuvo que pasar por quirófano para reparar su tobillo. Y, aunque había ciertas esperanzas de verle listo para el inicio de campaña, la cosa pinta fea. Chris Fedor, uno de los principales redactores de los Cavaliers para Cleveland.com, recientemente ha hablado con Kenny Atkinson al respecto.
«Yo no decido esas cosas. En última instancia, será cosa de Darius y el staff de preparadores, dirigido por Steve Spiro», anunció el técnico de los Cavaliers a Fedor. «Aunque no espero que esté para el training camp, quiero que se tome su tiempo y no le vamos a meter ninguna prisa».
Los Cleveland Cavaliers decepcionaron en la pasada postemporada después de un curso histórico para la franquicia. En parte, por chocarse de nuevo con las lesiones de Garland e Evan Mobley. Este curso, probablemente lo enfoquen de manera distinta. Priorizando llegar a abril, mayo y, quizás junio, en pleno estado de forma. Haber perdido a Ty Jerome supone un duro golpe al potencial ofensivo exterior del equipo, una de las claves de su éxito reciente. Sin embargo, apostar por Ball apunta a mejorar la parcela defensiva en el perímetro, uno de los debes del conjunto vino y oro.
Cleveland parte como segundo máximo favorito al título en 2026. Sobre todo teniendo en cuenta lo depauperado que ha quedado el Este a tenor de las lesiones de Jayson Tatum, Tyrese Haliburton y Damian Lillard. La posible ausencia de Garland para la opening night no afecta a esas proyecciones. Lo que sí es relevante es que el base encuentre la continuidad física que le ha faltado en los dos últimos cursos, sobre todo cuando más importa.
(Fotografía de portada de Ken Blaze-Imagn Images)