Fueron los Charlotte Hornets, penúltimos del Este, quienes acabaron con la impresionante racha de los New York Knicks al imponerse en su visita al Madison Square Garden por 112 a 105.
Los de North Carolina aprovecharon el cansancio de los neoyorquinos tras disputar una doble prórroga en Boston, y pusieron fin a sus 9 victorias consecutivas. Hasta tres jugadores de los visitantes sumaron al menos 20 puntos comandados por Kelly Oubre Jr. con 27; su compañero Terry Rozier III agregó 25 tantos y Gordon Hayward concluyó con 23.
En los Knicks malos porcentajes en general, especialmente de un R.J. Barrett, su máximo exponente con 27, aunque con un 10/24 en tiros de campo. Junto a él, todo su quinteto titular aportó dobles dígitos anotadores: Julius Randle (16); Mitchell Robinson e Immanuel Quickley (14), y Quentin Grimes (12).
«Nos quedamos sin combustible», reconoció Julius Randle al medio ESPN.
«Creo que a estas alturas de la temporada todo el mundo está cansado», señaló Gordon Hayward. «Estás pasando por ello, y juegas partidos cada dos noches. Y obviamente algunas de sus victorias fueron morales, que es otra parte la fatiga. La mental y la emocional. Así que ganarles esta noche fue muy importante para nosotros», explicó.
Brunson, baja otra vez
Por segunda jornada consecutiva Jalen Brunson causó baja por unas molestias en su pie izquierdo. Pese a que Tom Thibodeau aseguró que sus problemas no eran graves, los Knicks se mostraron cautelosos y prefirieron que descansara otra vez.
En su ausencia Quickley repitió titularidad, aunque con distinta suerte que en el anterior enfrentamiento contra Boston. Suyos fueron 14 puntos, 3 rebotes y 5 asistencias mediante un 5/16 en tiros de campo.
«No estuvimos bien en la transición defensiva y no corrimos como lo hemos hecho en anteriores ocasiones», admitió Thibodeau.
En la próxima jornada los Hornets se enfrentarán el 10 de marzo ante los Pistons de Dwane Casey, y los Knicks también jugarán ese día ante los Kings de Mike Brown.
(Fotografía de portada: Al Bello/Getty Images)