¡Qué partido y qué final vivimos entre Golden State y Oklahoma City! Viviendo entre el mito de los mejores Warriors y el descaro de unos Thunder que están llegando a la élite, nos quedó un espectacular partido que sirvió para entender que Chet Holmgren en mucho más que el hype que le rodea, y es que firmó un espectacular encuentro en el que consiguió la canasta clave para que los suyos terminasen cantando victoria 123-130 tras prórroga.
Para ser exactos fueron 36 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias. Los números hablan por sí solos, pero más allá de ellos queda para el recuerdo ese triple con el que forzó el tiempo extra cuando todo parecía perdido para los suyos; y es que apenas que quedaba poco más de un segundo cuando recibió el balón y, con Andrew Wiggins encima, se levantó para clavar un triple de genio. «Se sintió como una película» comenta Shai Gilgeous-Alexander. He aquí las pruebas.
Si Holmgren puso una pieza clave para acabar con los Warriors en el regreso a la acción de Stephen Curry, el ejecutor final de tan fantástico despliegue de baloncesto fue Shai Gilgeous-Alexander. El All-Star de los Thunder firmó una sensacional segunda mitad de 32 puntos, incluyendo 10 en una prórroga que los suyos dominaron por 13-6. Si OKC sigue en esta línea –ahora mismo tiene un balance de 9-4– es obvio que estará en la discusión por el MVP. Y es que no solo es élite en ataque, sino que en defensa, tal y como explica Chet, no se queda atrás.
«Cuando uno de tus mejores jugadores ofensivos es también uno de tus mejores jugadores defensivos, tienes algo enorme. Realmente es un jugador que nos pone en marcha en ambos extremos con su energía», comenta el novato.
El regreso de Curry
Los Warriors son mucho menos sin Stephen Curry, esto está claro, pero anoche ni con la vuelta del base tras una ausencia de dos partidos fue suficiente. El dos veces MVP de la NBA se fue hasta los 25 puntos con un 8 de 21 en tiros de campo. No estuvo mal, pero no pudo conseguir el ansiado triunfo para unos Warriors que acumulan seis derrotas consecutivas. La buena noticia para ellos es que por primera vez en la temporada el máximo anotador no fue su base, sino un Andrew Wiggins que se marchó hasta los 31 puntos con 5 triples (más que en el resto de la temporada).
«He estado trabajando duro. He estado haciendo muchas ruedas de tiro, trabajando duro y simplemente tratando de hacer las pequeñas cosas en la cancha, sabiendo que en algún momento obtendría la recompensa», comenta un Wiggins que será esencial para que Golden State supere esta crisis.
(Fotografía de Jason Miller/Getty Images)