Boston ni ha mejorado, ni parece que vaya a hacerlo. Los Celtics llevan todo el año montados en su particular montaña rusa, una de que les hace dar una gran impresión una noche para a la siguiente no pasar de la vulgaridad. Contra Chicago tocó lo segundo. Cayeron de manera contundente por 121-99 y ahora son séptimos de la Conferencia Este; es decir, equipo de play-in.
El encuentro tuvo poca historia. Los chicos de Brad Stevens aguantaron el primer cuarto, y nada más. Chicago, apurando sus escasas opciones de alcanzar la 10ª posición, fue marcando diferencias hasta verse 14 puntos arriba al descanso; renta que en la segunda parte ampliaron hasta los 22 puntos final con escasa oposición por parte de los verdes.
«Estamos jugando realmente bien. Realmente estamos compitiendo. Sabemos que tenemos la espalda contra la pared en este momento, así que, obviamente, desearía que hubiésemos jugado así desde el principio. Estaríamos viendo un escenario totalmente diferente. Pero esta es la posición desde la que nos toca luchar», comenta Zach Lavine, quien se fue hasta los 25 puntos, sobre la posibilidad de alcanzar a Washintgon (a tres partidos) o Indiana (a tres partidos y medio).
El regreso del escolta ha venido realmente bien a unos Bulls que han jugado durante más de dos semanas sin él y que han debido basarse, casi de manera exclusiva, en Nikola Vucevic. El pívot montenegrino también tuvo una destacada actuación anoche con un triple-doble de 18 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias. Se trata de su segundo triple-doble de la temporada y del primero de un jugador de Chicago desde el 6 de abril de 2017, cuando lo hizo Jimmy Butler.
Doble enfrentamiento con Miami
Boston podrá acabar cayendo al play-in, pero no será por falta de oportunidades para evitarlo. La derrota ante los de Illinois les deja a un partido de Miami, pero tienen la suerte de que justo ahora tienen dos partidos consecutivos contra los Heat. Si los ganan estarán por delante y contarán además con el desempate a su favor. ¿Podrán conseguirlo? Dependerá de la versión que den.
Tatum, desconocido
Así es. El mismo jugador que anotó 60 puntos igualando el récord de Larry Bird en Boston, se quedó anoche en 9 con un duro 3 de 15 en tiros de campo. Jayson Tatum es la estrella de los Celtics, pero quizás justo por eso es el mayor ejemplo de que no encuentran el camino. Kemba Walker por su parte se erigió con la esperanza de los verdes con 33 puntos que finalmente no sirvieron para mucho. Brad Stevens entiende que el rival simplemente fue mejor.
«Son un emparejamiento difícil para nosotros. Obviamente, creo que ellos jugaron muy bien y nosotros no fuimos capaces de lanzar bien a canasta. Todo empezó a complicarse desde ese punto», afirma.
(Fotografía de Jonathan Daniel/Getty Images)