Pasan los días y las semanas, pero lo que no cambia en la actualidad de la NBA es la discusión sobre el calendario de la temporada 2020-21 y su relación con las cuantiosas lesiones que se han sufrido.
James Harden, Kawhi Leonard, Anthony Davis, Giannis Antetokounmpo… Son muchas las estrellas que han visto cortadas o frenadas sus carreras en playoffs por problemas físicos. Sí, es cierto que las lesiones siempre han formado parte del juego, pero nunca había habido tantos All-Star fuera de combate en una misma temporada. Con tal escenario, fue el propio LeBron James quien alzó la voz a través de su cuenta de Twitter para señalar al apretado calendario como culpable de las numerosas lesiones recalcando: «No quisieron escucharme«.
A partir de las palabras de El Rey llegó una respuesta de la NBA señalando que el porcentaje de lesionados era el habitual y, como no podía ser de otra manera, el debate subió en intensidad.
Así hemos llegado hasta las Finales, instancia en la que participará Chris Paul como una de las estrellas de los Suns. El base, quien lleva muchos tiempo formando parte del Sindicato de Jugadores como su presidente, ha comentado tal situación justo antes del Game 1 para aclarar que los jugadores siempre han tenido voz en esta y otras decisiones.
«Algo que es una realidad sobre nuestra liga y sus jugadores es que siempre hay conversación. Hay un montón de chicos en el comité ejecutivo que están trabajando duro en muchas cosas ahora mismo mientras hablamos, día tras día. Ojalá supieran todas las cosas que están sucediendo. Entonces, las decisiones que se toman en cuanto a jugar o no jugar, los jugadores siempre están involucrados en ellas», aclara antes de analizar las lesiones.
«Las lesiones siempre son lamentables. Odias tenerlas. Pero al igual que cuando fuimos a la burbuja, todo se discutió en cuanto a los jugadores y el cuidado de sus cuerpos. Todo lo que es bueno para este chico y para ese otro puede que no sea lo mismo para este de aquí, pero todo siempre ha surgido siempre de una conversación y seguirá siendo así. Si a la gente no le gusta, sabes que todos tienen la misma oportunidad de ser parte de todas estas conversaciones», sentencia.
La historia es de sobre conocida. Por un lado está el hecho de que el plan era empezar a finales de enero o principios de febrero, algo que cambió radicalmente tras la intervención de las televisiones, las cuales llevaron el comienzo a diciembre por motivos económicos. Por el otro nos encontramos la gran diferencia de descanso entre equipos. Para Lakers hablamos de dos meses. Para Knicks por ejemplo fueron nueve. El desequilibrio es rotundo, pero las circunstancias empujaron a ello. De cara a la campaña 2021-22, con un calendario habitual, todo debe recolocarse para bien. Eso sí, que haya más o menos lesiones por ello es algo que no podemos adivinar.
(Fotografía de Christian Petersen/Getty Images)