Han pasado 21 partidos desde que Chris Paul jugase su último partido con los Warriors. El veterano base lleva desde el 5 de enero sin jugar después de sufrir una fractura en su mano en un partido ante los Detroit Pistons. Pero este martes Steve Kerr podrá volver a contar con él de cara al encuentro que jugarán los Warriors ante los Washington Wizards como visitantes.
Antes de su lesión Paul estaba completando una temporada notable. Tanto como líder de la segunda unidad, como en las ocasiones que saltó como titular. Mayormente en el último tramo previo a la lesión. El base tuvo que quedar apartado en el momento más turbulento de la temporada de los de San Francisco. Con Draymond Green aún apartado y el equipo registrando un 17-18 en su casillero de victorias-derrotas.
Ahora, y a pesar de ocupar el último puesto que da acceso al play-in, los californianos pasan por un momento dulce. Habiendo recuperado su potencial defensivo, aupando a Jonathan Kuminga, encontrando un nuevo rol para Klay Thompson y disfrutando de un Setephen Curry en estado de gracia. Aunque anoche el base firmase un 1/10 en triples ante Denver. Los Warriors están con un parcial de 9 victorias y 3 derrotas en febrero.
A esta corriente positiva se sumará Paul, que en la presente temporada aporta promedios de 8,9 puntos y 7,2 asistencias con un 42% en tiros de campo y un 36% desde el triple en 27 minutos por noche.
(Fotografía de portada de Christian Petersen/Getty Images)