Houston Rockets ha remontado el vuelo hasta colocarse quinto de la Conferencia Oeste. Para conseguirlo, los de Texas han contado con un excepcional James Harden, quien a base de actuaciones sublimes ha devuelto a los suyos a la pelea que todos esperaban. Pero en Houston hay vida más allá de su estrella. Alejándonos de los triples, justo bajo los aros, encontramos a Clint Capela, una pieza clave en el esquema de Mike D’Antoni a la que no le tiembla la voz a la hora de situarse en la batalla de los mejores, esa que libran aquellos que aspiran a ser All-Star.
«Creo que soy un All-Star. Creo que he estado jugando a nivel All-Star. Mis números así lo demuestran. Mi equipo está ganando y tengo un gran impacto en eso. Y, por supuesto, creo que James Harden es el MVP», señala Capela, quien hasta el momento promedia 17,2 puntos, 12,9 rebotes, 1,9 tapones y 1,4 asistencias; es decir, las máximas de su carrera en todas esas categorías.
Pese a esos grandes números, el pívot de Houston sabe que para estar en la élite de la NBA no basta con rendir durante algunos meses, sino que hay que demostrarlo día a día. Por ello, encara con entusiasmo los próximos partidos ante Jusuf Nurkic y Nikola Jokic.
«Tengo que demostrar que estoy a ese nivel. Estoy seguro de que así lo haré. Tengo bastante confianza en lo que estoy haciendo y en lo que está haciendo mi equipo. Mis compañeros creen en mí y me siendo bien con ellos. Estoy emocionado por hacer lo que hago. La NBA es así. Cada noche juegas contra los mejores», sentencia.
(Fotografía de Bob Levey/Getty Images)