Los Orlando Magic se están convirtiendo en expertos en vivir contra las cuerdas y en reponerse de un golpe nuevo cada día. El cuadro de Florida se ha llevado de forma heroica el duelo de esta madrugada ante los Nets, a quienes han doblegado 102-101 a pesar de un sinfín de dificultades, que incluyen la plaga de bajas, el haberse visto 21 puntos abajo, y, lo peor de todo: la lesión de Jalen Suggs.
No termina de quedar claro cuándo se produjo, pero al descanso la propia franquicia anunció que se le había diagnosticado un esguince en la muñeca derecha y que no volvería al choque. El escolta había sido sustituido a mediados del segundo cuarto por cometer su tercera falta personal, y aunque presentaba una especie de vendaje en la muñeca no termina de quedar claro cuándo la articulación dijo ‘basta’. Pero lo que sí está claro es que su baja dejó aún más magullado a un equipo ya muy falto de personal.
Orlando no estaba pasando un buen momento ni siquiera con Suggs en el partido, pero tras su ausencia la cosa se complicó todavía más. Jalen, especialista defensivo, se ha encargado con una solvencia sorprendente de asumir un papel más protagonista en ataque tras las bajas de Banchero y Wagner, y sin él a Mosley no le quedó otra que mirar al banquillo a ver de dónde podía sacar algo de inspiración ofensiva. Y, quizás no de la forma más ortodoxa, pero la encontró.
Exprimiendo los recursos
Los locales pasaron por tramos de atasco que llevaron a Brooklyn a colocarse 21 arriba mediado el tercer cuarto (50-71), pero supieron reaccionar de la mano de jugadores de los que nadie habría esperado este tipo de producción hace unos meses.
Tristan da Silva, que ha dado un enorme paso adelante en las últimas semanas, lideró al equipo con 21 tantos; Goga Bitadze, que parece haber explotado como jugador para sorpresa de todo el mundo, sumó 19 y capturó 11 rebotes; y Caleb Houstan, jugador de fondo de armario habituado a no jugar la mayoría de las noches, anotó 12. Y Cole Anthony, que llevaba un choque muy gris, se vistió de héroe al final con una canasta salvadora.
Estas contribuciones y la habitual defensa, que dejó a los Nets en solo 18 puntos en todo el último cuarto, permitieron a los Magic ir recortando distancias hasta que Bitadze les dio su primera ventaja de toda la segunda parte a falta de 17 segundos para el final. Una ventaja que, sin embargo, solo duró unos segundos. Cam Thomas, máximo anotador del choque con 25 tantos, erró su intento de triple, pero Jalen Wilson, héroe visitante con 13 puntos en el cuarto parcial, logró hacerse con el rebote antes de que saliera de banda. Y, de forma más decisiva, fue objeto de falta en el proceso.
Héroe en el último segundo
Wilson devolvió por tanto la ventaja a los neoyorquinos desde el tiro libre, dejando a Orlando con solo 6,2 segundos para buscar la proeza. Y entonces apareció Anthony.
El base llevaba un pobre 2/10 en el lanzamiento que no inspiraba precisamente confianza, pero Mosley decidió acudir a él y pronto vio recompensada su decisión, pues Cole logró abrirse hueco hacia el aro para finalizar con un floater a tablero que puso el 102-101 en el marcador, resultado ya inamovible a falta de 8 décimas.
Falló Cam Thomas
Thomas tuvo un último intento tras tiempo muerto, pero su lanzamiento fue escupido por el aro y dio a los Magic su 20ª victoria del curso, que les permite seguir afianzándose en la cuarta posición del Este y continuar mirando hacia arriba a pesar de los infinitos obstáculos en su camino.