Los Cavaliers necesitan ganar y retomar la senda del triunfo como de lugar y si la victoria llega tras batir el récord de pérdidas de uno de sus jugadores bienvenida sea.
En la victoria de Cleveland ante Indiana por 115 a 108 LeBron James sumó un nuevo triple-doble, el 63º de su carrera, pero esta vez lo acompañó por 11 pérdidas de balón, la cifra más alta de su carrera. 26 puntos, 11 asistencias, 10 rebotes y 11 balones perdidos que dan para que haga un curioso ‘cuádruple-doble’.
#LeBronJames (26 PTS, 11 AST, 10 REB) notched his 8th triple-double of the season in the @cavs win at home! #AllForOne pic.twitter.com/3mCvS36X6b
— NBA (@NBA) 27 de enero de 2018
James perdió 6 de los 11 balones en el último cuarto y el entrenador Tyronn Lue achacó al cansancio el escaso control de James en los últimos minutos. “Creo que estaba cansado al final”, dijo Lue, añadiendo que “creo que hemos tratado de utilizarle demasiado y eso es mi culpa” sobre los 40 minutos que estuvo en pista el alero.
“Tiene que hacer un mejor trabajo haciendo algunos pases”, explicó el técnico. “Ha hecho algunos pases que no hace normalmente. Pero cuando estás cansado jugando en mitad de la temporada puede ocurrir. A pesar de lo bueno que es le puede ocurrir a cualquiera”.
LeBron corrigió a su técnico en cuando a lo de sentirse casado, pero sí dijo que sus pases no habían sido correctos. “Simplemente tomé algunas malas decisiones”, dijo. “Tengo que mover mejor el balón, pero no estaba cansado”.
El dato
De acuerdo a Elias Sports Bureau, de los más de 1.600 triples-dobles registrados desde que se empezaron a contabilizar las pérdidas de balón en la temporada 1977-78, solo una vez de esas más de 1.600 ocasiones un jugador había sumado más de 10 pérdidas de balón. Fue Jason Kidd que en el año 2000 registró 18 puntos, 12 rebotes, 10 asistencias y 14 pérdidas. LeBron se puso anoche a la altura de Kidd.