Puede que con el paso de los años la modalidad de triples lejanos de Stephen Curry se convierta en una tendencia. Damian Lillard, uno de los jugadores con mayor capacidad ofensiva de la NBA, se está convirtiendo en otro jugador capaz de anotar desde una distancia poco común.
En la victoria de Portland Trail Blazers en Dallas, Lillard encestó dos triples consecutivos a una distancia del aro de entre 9 y 10 metros, recordando mucho al base de los Warriors.
Lo curioso es que los dos triples fueron muy similares, lanzando el balón al poco de recibirlo y sin apenas moverse.