Los Houston Rockets tienen motivos para estar contentos esta temporada. La llegada de Chris Paul ha encajado a la perfección, el equipo cuenta con el mejor balance de la competición y su ataque es el mejor de toda la NBA. El proyecto está funcionando en la dirección adecuada.
Sin embargo, su general manager, Daryl Morey, afirma que todos esos logros no son tan importantes para él. Tanto él como el equipo tienen una obsesión en su cabeza: ganar a los Golden State Warriors, campeones de la Conferencia Oeste en los últimos tres años y ganadores de dos de los últimos tres anillos.
«Es lo único en lo que pensamos», afirmó Morey a ESPN. «Creo que no debería decir esto, pero, básicamente, estamos obsesionados pensando cómo podemos conseguir ganarlos», añadió.
«El año pasado nos ganaron los Spurs así que estamos bastante preocupados por ellos, siempre van un paso por delante y es el equipo que mejor nos defiende. Pero lo hemos calculado: 90% seguro, si queremos ganar el anillo, vamos a tener que batir a los Warriors en algún momento, así que estamos totalmente centrados en eso. Los movimientos del verano y todo lo que hacemos durante la temporada está basado en ello», concluyó.
Morey prosiguió: «¿Cuál es el objetivo de esta liga si no es conseguir un anillo? Nos gustaría quedar primeros en el Oeste, ganar más partidos que nunca en temporada regular…Eso son cosas buenas, pero, francamente, pasamos la mayor parte del tiempo pensando cómo podemos ganar a los Warriors en siete partidos. Estamos seguros de que eso es lo que va a definir nuestra temporada», finalizó.
Golden State eliminó a los Rockets en las Finales de Conferencia de 2015 y un año después en primera ronda de la playoffs. La temporada pasada cayeron contra San Antonio en Semifinales de Conferencia. Houston ha realizado movimientos muy importantes este verano y uno de los aspectos claramente mejorados es la defensa: en estos momentos es la séptima mejor de toda la competición y ese hecho eleva, sin duda, el potencial del equipo un peldaño más arriba.