El base de Sacramento se perdió 17 partidos en la presente temporada justo por una lesión similar
Malas noticias para Sacramento Kings. Los californianos, uno de los equipos que pelearán desde el 30 de julio por arrebatar la octava plaza de la Conferencia Oeste a Memphis Grizzlies, no podrá contar para los próximos 7-10 días con De’Aaron Fox, quien ha sufrido un esguince en su tobillo izquierdo durante el último entrenamiento.
La lesión del base es preocupante por dos motivos. Por un lado no es seguro que no vaya a estar más tiempo alejado de las canchas, ya que la perspectiva es volver a evaluarlo una vez pase el periodo anunciado. Por otro, durante el transcurso de la presente campaña ya sufrió la misma dolencia en su articulación del pie izquierdo, la cual le hizo perderse un total de 17 encuentros. El hecho de que falle el mismo tobillo crea cierto temor sobre su propensión a tales lesiones.
La importancia de Fox para los Kings es capital. En la presente campaña está promediando 20,4 puntos, 6,8 asistencias, 4 rebotes y 1,4 robos. Su mayor valor, dada du enorme velocidad con el balón en las manos, lo encontramos en ataque. Cuando él está en pista los californianos son 5,2 puntos por cada 100 posesiones mejor que cuando está sentado.
Sacramento lleva sufriendo contratiempos desde hace semanas. Para empezar aún no cuenta en su expedición con dos jugadores relevantes como Harrison Barnes y Alex Len, quienes permanecen en Sacramento en cuarentena tras dar positivo por coronavirus. A la ausencia de ambos se une la de Richaun Holmes, que está realizando cuarentena en su habitación del hotel por traspasar los límites de la burbuja hace escasos días. Así están encarando los Kings una estancia en Disney a la que llegan a tres partidos y medio de distancia de Memphis Grizzlies, e igualados en tal situación con New Orleans Pelicans y Portland Trail Blazers.
(Fotografía de Christian Petersen/Getty Images)