DeAndre Jordan arrancará este año una nueva andadura en los Nuggets, que se convertirán en el séptimo equipo de su carrera. El pívot, que firmó un contrato de un año a cambio de 2,9 millones con los de Colorado, ha valorado su posible impacto en unas declaraciones para el Denver Post, en las que hablado sobre qué cree que puede aportar cuando empiece el curso.
“Obviamente todo el mundo sabe que Jokic va a ser la cabeza del equipo” comenzó. “Teniendo eso en cuenta, mi papel será salir del banquillo y ayudar a la segunda unidad a marcar el ritmo, poniendo bloqueos a mis compañeros para que puedan liberarse y encontrar mejores tiros. Además, trataré de finalizar en transición, dominar el rebote, y ser una presencia defensiva durante el tiempo que esté en pista”.
Esto parece más fácil de decir que de ejecutar para el pívot, que lleva ya algunas temporadas en las que ha tenido bastantes problemas para tener impacto positivo en sus equipos. A medida que su condición física ha ido a menos, sus carencias se han ido haciendo más evidentes y cada vez ha tenido más problemas para sumar más de lo que resta, lo que le ha ido empujando al fondo de armario de las franquicias por las que ha pasado.
Con todo, los Nuggets parecen tener confianza en sus capacidades, pues se hicieron con sus servicios al poco tiempo de arrancar la agencia libre. Veremos si, una vez que pise la pista con la camiseta de Denver, puede demostrar que dicha confianza estaba justificada.
(Fotografía de portada: Tim Nwachukwu/Getty Images)