Eso es justo lo que parece que va a estudiar la NBA. Nos ponemos en situación. Se disputaba el último cuarto de un partido ya decidido en Utah cuando Rudy Gobert recibía una falta dura de Raymond Felton. La jugada no pasaba a mayores. El pívot francés se dolía sobre la cancha y apenas realizó un reproche verbal al base antes de que ambos acabasen sancionados con sendas técnicas. Entonces, ¿qué tiene que ver Russell Westbrook en todo esto? Pues el actual MVP ingresó en pista sin saberse aún si contaba con el permiso para ello y se encaró con Gobert.
Ante estas situaciones la norma de la NBA es tan dura como tajante. Ante cualquier altercado que ocurra en la cancha ningún jugador del banquillo puede entrar en la pista, ya que esto acarrearía la sanción inmediata por un partido. La regla tiene como objetivo evitar que más jugadores se vean involucrados en una hipotética pelea. Pues bien. No está clara la situación de Westbrook.
No lo está porque justo cuando se desarrollaba la jugada de la falta de Felton, él ya estaba esperando junto a la mesa para pedir permiso para entrar. La pregunta es: ¿Fue un árbitro el que le llamó para que saltase a la cancha o lo hizo por voluntad propia sin contar con tal aprobación? En el primer caso todo quedaría en anécdota. En el segundo la suspensión debería hacerse efectiva. He aquí la acción.
¿Investigación abierta?
Eso parece. El periodista Andy Larsen de KSL.com (medio de Salt Lake City), se habría puesto en contacto con el estamento arbitral para preguntar por la jugada, pero la NBA le indicó que los colegiados no harían comentario alguno sobre el asunto, ya que el incidente sería revisado por el comité disciplinario de la liga. No sabemos cómo acabará, pero si Westbrook invadió la cancha por voluntad propia puede dejar a sus compañeros contra las cuerdas con los brazos bajados. Enfrentarse a un 3-1 no es fácil, pero hacerlo sin tu mejor jugador se convierte en una prueba de fuego.