Año redondo para unos Toronto Raptors que están a punto de certificar su triunfo en la División Atlántica, y para un DeMar DeRozan que ha explotado para ser, definitivamente, uno de los líderes de los canadienses en una campaña que supone el regreso a los Playoffs tras cinco ediciones de ausencia.
Su mejora es comprobable estadísticamente. Si el año pasado promediaba 18.1 puntos, 3.3 asistencias y 3.9 rebotes, en el presente curso se ha disparado hasta los 22.7 puntos, 3.7 rebotes y 4.4 asistencias.
Tal ha sido su progreso que ha conseguido igualar un récord de la franquicia que estaba en posesión única, ni más ni menos, que de Vince Carter desde la campaña 1999/2000, temporada en la que el actual alero de los Mavericks superó los 1700 puntos y 300 asistencias en regular season, justo lo mismo que ha hecho ahora DeRozan, que tras el triunfo contra los 76ers se ha colocado con 1726 puntos y 304 asistencias.
El borrón de los triples
Con tanto bueno aportado por el jugador natal de California, apenas hay peros que ponerle; sin embargo, aún hay alguna faceta en la que puede mejorar, como es el caso de los triples. Así, tras cinco años en la NBA aún no ha conseguido superar el 30 % en ninguna de las temporadas, siendo la actual en la que está más cerca al encontrarse en estos momentos con un 29.7 %.