Pocos equipos inspiran mayor confianza que Denver. En la anterior campaña eran buenos, pero les faltaba una pieza tan esencial como Jamal Murray. En el presente, con el guard recuperado y Nikola Jokic a su habitual nivel estelar, se encuentran cómodamente en la primera plaza de la Conferencia Oeste con un balance de 34-14 (2.5 partidos por delante de Memphis).
Para alcanzar tan ventajosa situación, los Nuggets derrotaron anoche a New Orleans. Parecía que sería un choque sencillo, ya no solo por las bajas del rival, sino porque mediado el mismo vencían por hasta 19 puntos. Lo tenían en su mano, más aún al estar nueve puntos arriba con cinco minutos por jugar; sin embargo, todo se complicó al estar cinco largos minutos sin anotar, lo cual aprovecharon los de Luisiana para dar la vuelta al partido hasta verse un tanto arriba con 38 segundos en el reloj. Por suerte para Denver, en sus filas cuentan con un dos veces MVP que logró la canasta que les pondría definitivamente por delante para vencer 98-99.
Nikola Jokic fue el salvador y hacedor durante toda la noche. Una vez más cerró su actuación con un triple-doble, en esta ocasión de 25 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias. Junto a él, Jamal Murray sumó otros 25 tantos. Concluido el encuentro, el center serbio huyó de los elogios individuales.
«Solo estoy jugando al baloncesto. Me alegro de haber encontrado compañeros abiertos a los que darle el balón, aunque fuese yo quien hiciera la última canasta. Estoy contento de que hayamos ganado el partido. Los premios individuales realmente no importan», sentencia.
El tiro exterior, gran diferencia
No fue la mejor noche de los tiradores en ninguno de los equipos, pero mientras en los Nuggets tenían un rendimiento decente, en New Orleans se hundían sin remedio. Así, los visitantes acabaron metiendo 11 triples con un 33% de acierto, superando claramente los solo cinco anotados por los Pelicans con un crudo 19,2%. Especialmente doloroso fue el 0 de 8 que firmó C.J. McCollum, quien concluiría pese a ello con 20 puntos para ser el máximo anotador de su equipo. Jose Alvaro, con 17 tantos, le secundó desde el banquillo.
Cerrada la contienda, Michael Malone se mostró satisfecho por la defensa que realizaron sus chicos. «Mantener a un equipo en 98 puntos en la NBA de hoy… eso no sucede muy a menudo. Ganar un partido por un punto en la carretera contra un equipo muy desesperado… me parece correcto», expresa el head coach de la organización de Colorado.
Hundidos sin Zion
La depresión de los Pelicans sin Zion Williamson es un hecho. Desde que sufriese una distensión en el tendón de la corva hace tres semanas, el equipo solo ha sido capaz de imponerse en tres de sus últimos 11 compromisos. Tal mala racha les ha llevado a perder la tercera plaza de la Conferencia Oeste en favor de los Sacramento Kings, y a ver cómo equipos como Clippers o Mavericks se están acercando (y amenazando) su cuarta posición. La buena noticia es que Zion no debería tardar muchos más partidos en regresar.
(Fotografía de Justin Tafoya/Getty Images)