Detroit empieza a soñar a lo grande

Los Pistons empiezan a pensar que algo más que el play-in es posible. El cuadro de Michigan ha dado continuidad a su gran momento de ...

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Por Aitor Darias

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Los Pistons empiezan a pensar que algo más que el play-in es posible. El cuadro de Michigan ha dado continuidad a su gran momento de forma doblegando por 104-114 a los Hawks en un duelo directo, resultado que vale para afirmar algo que, viniendo de donde veníamos, se antoja imposible: a día de hoy, Detroit es equipo de playoffs.

Los de Bickerstaff han escalado hasta la sexta posición del Este comandados por un sensacional Cade Cunningham, que con 29 puntos y 11 asistencias ha vuelto a ser la principal baza ofensiva del equipo. De su mano, han conseguido un triunfo mucho más holgado de lo que el marcador final invita a pensar, confirmando el gran estado no solo del base sino de prácticamente toda la plantilla.

Y es que esta volvió a ser una gran noche también para Malik Beasley, que brilló de nuevo desde el banquillo con cinco triples, o para Ausar Thompson, cuyo impacto defensivo sigue haciéndose notar y que esta vez aportó además 17 tantos a base de atacar el aro. Cada vez son más las cosas que salen bien en Detroit. Y así, no solo los triunfos en el casillero sino también la confianza crece a pasos agigantados.

Poco de Trae

Ayudó al dominio de los visitantes, que llegaron a ir ganando por 22 puntos, la escasa aportación de Trae Young, que si bien está en una temporada de menos protagonismo en la anotación quedó esta vez demasiado opacado. Con un pobre 5/13 en tiro, el base no pudo pasar de los 13 tantos, dejando a los suyos faltos de una anotación que sus compañeros no pudieron asumir.

Y es que fue una noche de desacierto a nivel general. Dyson Daniels y Jalen Johnson sí respondieron con 20 y 17 puntos respectivamente, pero a la vez se combinaron para un 0/11 en triples. Y no estuvieron mejor De’Andre Hunter (0/9) y Bogdan Bogdanovic (0/4), que contribuyeron al paupérrimo 15,8% que firmaron los Hawks desde el perímetro y que les privó de poder al menos pelear el choque hasta el final.

(Fotografía de portada: Dale Zanine-Imagn Images)

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