Golden State se suma definitivamente a ese grupo de equipos con grandes aspiraciones que han comenzado la temporada dubitativos. Los chicos de Steve, actuales campeones, recibieron anoche un duro varapalo en cancha de Detroit, justo después de verse superados igualmente por Charlotte Hornets. No le restamos mérito a estos equipos, pero son rivales ante los que los californianos deberían ganar sobre el papel.
Y decimos sobre el papel porque está claro que sobre el parqué no ha sido así. Contra los Pistons empezaron bien. Un acertado primer cuarto les permitió colocarse con 10 puntos de ventaja; sin embargo, poco tardó en diluirse tal escenario para ver como los locales le daban la vuelta al marcador en endosándoles un parcial de 34-18 en el segundo cuarto. No pudieron reaccionar. En la segunda parte llegaron a perder por hasta 19 tantos y Detroit vivió un plácido final de partido hasta vencer por 128-114.
«Estoy muy contento por nuestros muchachos después del trabajo que hicieron esta noche. Eso es lo que sucede con un equipo joven en reconstrucción. Habrá noches como esta en las que la gente dirá: ‘Vaya, ¿de dónde salió eso?’ Eso es emocionante», comenta Dwane Casey, head coach de los Pistons.
Lo cierto es que en Detroit brillaron varios jugadores. Cade Cunningham se quedó a un pase de canasta del triple-doble al firmar 23 puntos, 10 rebotes y 9 asistencias. Saddiq Bey fue el máximo anotador con 28 puntos. Isaiah Stewart logró un fantástico doble-doble de 24 puntos y 13 rebotes. Bojan Bogdanovic se marchó hasta 21 tantos.
«Creo que esta noche mostramos lo que será el baloncesto de los Pistons. Jugamos en defensa de la manera que necesitábamos hacerlo todas las noches, y en la parcela ofensiva compartíamos el balón y nos asegurábamos de que todos hicieran tiros», expresa Stewart.
Problemas defensivos de Warriors
Más allá de la derrota en sí, a Steve Kerr le preocupa el nivel que están mostrando sus chicos en defensa. El entrenador jefe entiende que es justo ese el lugar desde el que parten muchas de las dificultades que están pasando en ataque. «No podemos parar de cometer faltas. Necesitamos que algo haga ‘click’ en nuestros muchachos. En estos momentos debemos estar cerca de la parte inferior de la liga en eficiencia defensiva y eso nos pone en algunas malas situaciones ofensivamente», analiza.
A título individual, lo mejor de la noche para Golden State fue su backcourt titular, ya que Stephen Curry se fue hasta los 32 puntos y Jordan Poole alcanzó los 30. Más allá de ellos dos, solo Andrew Wiggins alcanzó las dobles figuras de anotación con 10 tantos. Klay Thompson se perdió el partido por descanso.
(Fotografía de Rick Osentoski/Getty Images)