Los de Indianapolis acumulan un duro balance de 1-6 desde el regreso a las pistas de Oladipo
Spencer Dinwiddie sentenció a Indiana Pacers. Tras un partido en el que el base no estuvo nada acertado, tomó la responsabilidad de la última jugada para clavar un tiro lejano que daba la victoria a Brooklyn Nets por un ajustado 105-106, o lo que es lo mismo, provocaba la sexta derrota consecutiva de los chicos de Nate McMillan.
Lo cierto es que el desarrollo del encuentro no invitaba a pensar que Dinwiddie metería ese último lanzamiento. Terminando con un 4 de 15 en tiros de campo y un 0 de 7 en triples, fueron los tiros libres (13 de 15) los que le llevaron a concluir con 21 puntos, además de repartir 11 asistencias. Al concluir la noche admitió que por momentos pensaba que iba a dar al traste con el trabajo de sus compañeros.
«En muchos momentos estaba pensando que iba a arruinar el partido cuando estábamos jugando muy bien a nivel colectivo. Pensé: ‘Venga tío, no puedes ser el que estropee este gran trabajo’. Ese último lanzamiento hizo que fuese diferente», señala.
Más allá de la actuación de Dinwiddie, en los neoyorquinos destacaron los 15 puntos y 8 rebotes de Joe Harris así como el doble-doble de 11 puntos y 19 rebotes que aportó DeAndre Jordan desde el banquillo. Se trata de la vigésima vez en la presente campaña en la que el veterano pívot acaba con dobles dígitos de capturas partiendo desde la segunda unidad.
Indiana, de capa caída
Que el regreso de Victor Oladipo iba a provocar una transición de ajustes estaba claro, pero que este fuese a ser tan duro pocos podían esperarlo. Son ya seis derrotas consecutivas –dos por un punto– y la sensación de que son incapaces de cerrar los partidos. Anoche, aunque contaron con el cuarto triple-doble de la temporada de Domantas Sabonis, quien firmó 23 puntos, 10 rebotes y 11 asistencias, el esfuerzo quedó en nada cuando desperdiciaron cuatro puntos de renta en el último minuto. McMillan cree que el paso al frente pasa en parte por manejar esas situaciones.
«Teníamos una ventaja de cuatro puntos en los últimos momentos. Tenemos que ganar en esas circunstancias. Hay que seguir anotando y lograr pararlos; algo que una vez más no fuimos capaces de hacer. Somos nosotros, de nuevo, quienes no supimos cerrar el partido».
(Fotografía de Andy Lyons/Getty Images)