Como si la lesión hubiese sido un mal sueño. De esos que, cuando despiertas, no recuerdas absolutamente nada.
Anoche vimos a un Kevin Durant en tal estado de forma, que cualquiera diría que se perdió 63 partidos la pasada temporada regular. Cada nuevo encuentro de pretemporada es otro paso de gigante para KD en su imparable vuelta a la élite del baloncesto.
Frente a los Denver Nuggets, su última presa (111-98), Durant anotó 23 puntos en una serie de 9/14 en tiros de campo y con canastas de la más diversa factura: mates, crossovers, triples, fade aways, penetraciones…vamos, el jugador con el repertorio habitual al que nos tenía acostumbrados antes de la lesión.
KD está de vuelta.