Menos de cinco segundos, tres tiros libres para Andrés Nocioni y cinco puntos por debajo el Real Madrid. Muchos aficionados del BarclayCard Center comenzaron a marcharse creyendo que la victoria ya pertenecía a Oklahoma City Thunder, obviando que en el baloncesto realmente cualquier cosa puede pasar. Y pasó.
Sergio Llull terminó con el balón en las manos y le dio tiempo a encestar su cuarto triple de la noche, tercero sobre la bocina. Y con él llegó la prórroga y el deliro.
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Gran espectáculo para todos los aficionados y objetivo conseguido. El Real Madrid finalizó la noche ganando por 142 a 137.