El fallecido, que fue maltratado por fuerzas policiales, y Jackson mantenían una estrecha relación
El estado de Minnesota (y todo Estados Unidos) arde en cólera después de conocerse los hechos por los que George Floyd (46 años) perdió la vida el pasado lunes, después de ser arrestado y maltratado por la policía de la ciudad.
En las imágenes que pudieron rescatarse del suceso, se observa cómo el detenido, que había sido interceptado por estar supuesto en estado de embriaguez y por supuesto uso de dinero falsificado, fue tratado con un grado elevado de brutalidad. Cuatro miembros de policía doblegaron a Floyd, sobre quien emplearon modos de lo más severos. Uno de los miembros de seguridad mantuvo su rodilla sobre el cuello del detenido durante cinco minutos por más que Floyd suplicaba que no podía respirar. Después de unos minutos, George Floyd falleció a causa de la intervención policial.
Ya el martes, el conocimiento público de los hechos produjo importantes protestas en Minnesota, con miles de manifestantes clamando contra lo sucedido y contra las fuerzas del orden.
También la NBA se hizo eco del incidente. Numerosas personalidades manifestaron su indignación con lo sucedido: Steve Kerr, Jaylen Brown, LeBron James, Isaiah Thomas…
Relación con Jackson
El caso es que el fallecido era íntimo amigo de Stephen Jackson, exjugador de la NBA retirado en 2014, y últimamente inmiscuido en el amanecer de la competición BIG 3.
Jackson lamentó lo sucedido, lleno de dolor, clamando que George Floyd era como un hermano para él.
«Floyd era mi hermano, tío. Nos llamábamos ‘gemelos’, tío. Todo el mundo sabía que Floyd y yo nos llamábamos «gemelos». Él estaba en Minnesota, cambiando su vida, era conductor de camiones. Él estaba haciendo lo que se suponía tenía que hacer (por su trabajo), tío, y habéis matado a mi hermano. La gente no se va a preocupar por esto hasta que no le salpique directamente en su puerta», pudo compartir Jackson en un vídeo de Instagram.
El escándalo ha sacudido todos los estratos de la sociedad estadounidense, representando un ejemplo más de las barreras raciales que todavía quedan pendientes en Estados Unidos.
(Fotografía de portada: Sean Gardner/BIG3 via Getty Images)