Uno de los grandes debates de la NBA, el que rodea a la posible eliminación del Hack-a-Shaq, parece cerrado. El Comisionado de la liga, Adam Silver, ha mostrado su predisposición a que las faltas intencionadas para llevar a jugadores a la línea de tiros libres sigan siendo posibles; eso sí, asegura a su vez que seguirán de cerca su evolución en las próximas temporadas.
«No voy a decir que no vayamos a cambiarlo nunca, pero por ahora seguiremos estudiándolo. Tuvimos una larga discusión en verano con el comité de competición y la decisión fue dejarlo estar y observar cómo sigue. Me inclino por no cambiarlo, pero lo estudiaremos», explica en declaraciones a ESPN Radio.
Analizando los pormenores que han llevado a tal determinación, Silver señala que es complicado tomar decisión alguna dado el grado de conflicto de intereses que ello supone.
«Desde un punto de vista estético y de entretenimiento entiendo que es malo para los aficionados. Pero por otro lado, he oído, literalmente, a miles de entrenadores, no sólo de Estados Unidos, diciendo: ‘No se puede cambiar esa regla ¿Qué ejemplo se envía a esos niños que están aprendiendo a jugar, es una parte fundamental del juego tener un chico que sea capaz de convertir los tiros libres».
Centrando los argumentos en la NBA, el Comisionado entiende, al igual que han señalado algunos entrenadores de la liga, que sería cambiar una norma pensando únicamente en dos jugadores. «Desde un punto de vista competitivo, estaríamos cambiando en gran medida una regla para dos jugadores y dos equipos. DeAndre Jordan y Dwight Howard. Ellos están en la mayoría de los casos».