La prestigiosa Universidad de Notre Dame se aseguró el compromiso de Corey Robinson, un joven receptor más conocido por ser el hijo de uno de los mejores pivots de las últimas décadas en la NBA: David Robinson.
«El almirante», actualmente dedicado principalmente a causas benéficas, y aún presencia habitual en los partidos de los Spurs, verá como su hijo, una de las mejores promesas en su deporte, jugará en uno de los mejores equipos universitarios en este deporte, campeón de 11 títulos nacionales a lo largo de su historia. Corey Robinson rechazó ofertas de varios equipos al aceptar la de los Fighting Irish, incluída la del equipo de la marina estadounidense, Navy, donde su padre empezó a despuntar antes de entrar en la NBA.
Casi 25 años después, otro Robinson será una de las estrellas de la NCAA. Sólo que, esta vez, será en un deporte diferente.