Considerado tras dos temporadas en la liga como un base completo, Elfrid Payton no quiere que su definición en la NBA se quede ahí, sino que aspira a ser uno de los mejores en su posición. Por ello, este verano está dedicado casi en exclusividad a trabajar su tiro en suspensión, algo que ve esencial para dar ese salto.
«Este descanso entre temporadas lo estoy utilizando para trabajar aquí (ha participado en un campus de baloncesto en Westwego) y en Orlando. Estoy trabajando sobre todo en mi finalización y en mi suspensión, junto a otras cosas», expresas en declaraciones recogidas por New Orleans Times-Picayune.
Lo cierto es que Payton ya mejoró en su segundo año respecto a su temporada de novato. Así, si en tiros de campo pasó del 42,5% al 43,6%, más interesante fue su progreso en el triple, pasando del 26,2% al 32,6%. Sin embargo, a un base se le presupone, casi exige, que sea un buen lanzador desde la personal, y ahí, con un primer año en el 55,1% y un segundo en el 58,9%, hay mucho margen de mejora.
Ilusionado con el proyecto
Lo que no ha pasado desapercibido para ningún aficionado ni para él mismo es que los Magic han decidido cambiar el rumbo. Nuevo entrenador, Frank Vogel, y hasta siete nuevos compañeros, han despertado la ilusión del base formado en Louisiana-Lafayette. «Estoy emocionado. Estoy impaciente por empezar a trabajar con mis nuevos compañeros», sentencia.