Joel Embiid lideró a los 76ers a una nueva victoria. Los de Pensilvania se impusieron a los Hornets por 131-113 gracias a la descomunal actuación del pívot, que con 53 puntos firmó su segunda mejor anotación de la temporada y puso el triunfo en bandeja a los suyos, que vivieron una noche relativamente plácida. Pese a que la diferencia durante la noche no fue tan amplia como el marcador final puede invitar a pensar, Philadelphia tuvo siempre el control del duelo en la segunda mitad, y nunca pareció en peligro de dejarlo escapar.
Embiid y su capacidad para anotar continuamente tuvieron mucho que ver al respecto. Con su 20/32 en tiros de campo, el camerunés ofreció toda una masterclass ofensiva, explotando sus recursos para sumar tanto en la pintura como desde la media distancia y el triple y haciendo que Charlotte no encontrase forma de pararlo. Si bien fue criticado por su forma de arrancar el curso, esta es ya la segunda vez que supera los 50 tantos en los 18 partidos que ha disputado, dejando claro que haber terminado como máximo anotador del año pasado no ha ni mucho menos saciado su hambre.
«Hemos ganado, y siempre es bueno hacer estas cosas cuando ganas» afirmó. «Me alegra poder contribuir en las victorias. Creo que hemos movido muy bien el balón durante toda la noche para que me llegase en buenas situaciones».
James Harden fue clave en la exhibición de Joel, pues, ejerciendo de nuevo más como playmaker que como anotador, facilitó la vida a todos sus compañeros y en particular al pívot. La Barba, que sumó 19 puntos, brilló como pasador con un total de 16 asistencias, de las cuales 10 fueron repartidas a Embiid. El ex de los Nets cada vez parece entenderse mejor con el center, y su buena asociación está ayudando a los 76ers a escalar posiciones en una Conferencia Este de la que ya son quintos.
Mucho más abajo, en el 14º puesto, están los Hornets, que suman con esta cinco derrotas consecutivas y siguen sin ser capaces de enderezar el rumbo de una temporada que ya no parece tener salvación. Terry Rozier y Kelly Oubre Jr. trataron con 29 tantos de cada uno de aferrar a los de Carolina del Norte al partido, y en cierta medida lograron evitar que Philadelphia se escapase del todo hasta los últimos minutos, pero fue un esfuerzo en vano. La falta de apoyos y la incapacidad para ser un obstáculo para Embiid fueron lacerantes, aunque Steve Clifford prefirió quedarse con los elementos positivos.
«Hoy hemos tenido una buena intención» comentó. «En los primeros seis o siete minutos del partido hemos defendido realmente bien, aunque la defensa en transición ha sido nuestro verdadero problema y es algo que tenemos que solucionar. Al margen de Joel, esa ha sido la historia de la primera parte. Hemos hecho bastantes cosas bien».
(Fotografía de portada: Tim Nwachukwu/Getty Images)