Errores arbitrales ha habido y habrá siempre. No me gusta criticarlos ni exponerlos demasiado a la luz; especialmente en un deporte tan limpio como es la NBA. Pero con los Playoffs cada vez más cerca y muchos equipos en la pugna, es inevitable fijar cada vez más el monóculo. Especialmente en esos «dos minutos finales» donde los árbitros tienen la posibilidad de acudir a la repetición para revisar y corregir, si es necesario, la decisión previamente tomada.
Pues Dallas Mavericks todavía se juega mucho, y los Nuggets no están descartados del todo. Y ayer, el choque entre ambos se fue a una prórroga en la que finalmente se impusieron los de Colorado 116-114.
Pero previamente, en esos avizorados compases finales de último cuarto, el ‘Last Two Minute Report’ que realiza la NBA dejó en evidencia a los dueños del silbato. Según el informe se cometieron tres errores, dos de ellos importantes, y todos desfavorecieron a los Mavs.
El más palpable se produjo con 20,1 segundos restantes en el reloj. El bloqueo ilegal de Kenneth Faried sobre Deron Williams es más que claro —casi le rompe una costilla—, pero los colegiados no detectaron la infracción. La continuación de esa jugada, para más inri, terminó con falta a Will Barton quién encestó sus dos tiros libres.
Ya en la prórroga, consta otro error —éste me cuesta mucho más verlo por más bucle que haga— en el que, según la nota, Gary Harris golpeó la cabeza de D-Will —estuvo en todas el chico—, cometiendo falta en su entrada a canasta y en la que finalmente erró la bandeja.
Cruciales o no, el caso es que los Mavs perdieron, y anoche volvieron a caer ante los Clippers. Hoy son sextos en el Oeste, empatados por Portland, con Utah (9º) a cuatro victorias en la persecución. Mark Cuban, conociéndolo. seguro que ha tomado buena nota de ello y ya lo reserva para su próximo cóctel de pacíficas declaraciones.