Si los Kings ya teniendo a DeMarcus Cousins se las están viendo negras para rascar un triunfo, ni imaginemos ahora que el pívot ha caído lesionado.
Durante la derrota que se llevaron ante los Grizzlies por 121-117, Cousins sufrió un esguince en su tobillo izquierdo cuando restaban poco más de dos minutos para finalizar el encuentro.
En una bola suelta en el aro de Sacramento, Marc Gasol se lanzó al suelo intentando buscarla. Su intento de rescatar la posesión se tradujo en una barrida de Cousins, que cayó al suelo tras haberle «pillado» su tobillo.
El jugador tuvo que ser ayudado a salir de la cancha, sin poder apoyar su pie. La buena noticia es que se descarta que se produjese algún tipo de rotura, por lo que su diagnostico está marcado ahora como día a día.