Hay jornadas en las que Luka Doncic parece literalmente indefendible, y la de anoche fue una de ellas. El esloveno, en el que fue uno de sus mejores partidos de la temporada, se cobró la venganza ante los Clippers, quienes habían derrotado a los Mavs hace apenas dos días y ante quienes cada duelo parece personal tras lo vivido en los pasados playoffs. Dallas venció así por 105-89, alcanzando las 21 victorias y manteniéndose en la octava posición de la Conferencia Oeste.
Doncic terminó con 42 puntos, anotados de todas las formas y colores. Bandejas, floaters, media distancia, triples… Luka sacó a relucir su amplísimo repertorio de recursos, y lo hizo además con un alto nivel de acierto que le hizo anotar el 57,1% de los tiros que intentó (54,5% en triples), evitando así que los porcentajes pudieran poner en duda la calidad de su actuación.
Pero no todo fueron puntos, ya que el base terminó también con 9 asistencias y 6 rebotes en su haber, y sumó además en la faceta defensiva al robar 3 balones y colocar 2 tapones. Todo esto convirtió a Doncic en el indiscutible MVP del encuentro, y le permitió lograr que su presencia en pista se saldase con un parcial de +29 para los Mavericks.
Más allá de Luka, sin embargo, la noche fue más discreta para los texanos. Tim Hardawy Jr., con 15 tantos, fue el segundo de los suyos en anotación, seguido de cerca por los 14 de Josh Richardson, quien brilló especialmente en defensa. Por su parte, Kristaps Porzingis firmó un doble-doble al anotar 11 puntos y capturar 13 rebotes, aunque no tuvo una noche particularmente lúcida en ataque.
Esto llevó a Tyronn Lue a elogiar el esfuerzo defensivo de los suyos, alegando que solo Doncic había sido capaz de hacerles daño: «Creo que hemos hecho un gran trabajo durante prácticamente todo el partido, con la única excepción de Luka, que nos ha destrozado. En ataque, sin embargo, nos ha faltado confianza, ya que no hemos compartido demasiado el balón. Hemos forzado demasiadas situaciones».
Y es que al técnico no le falta razón al hablar sobre el rendimiento ofensivo de los suyos. Con 89 puntos, los Clippers firmaron su segunda peor anotación de la temporada, solo empeorada por los 73 que anotaron en diciembre ante, precisamente, los Mavs.
Paul George, con 28 tantos, fue el más destacado en dicho lado de la cancha, mientras que Kawhi Leonard, con 20 y 7 asistencias, jugó también un partido bastante sólido. Sin embargo, al margen de las estrellas y con la posible excepción de Ivica Zubac y sus 14 puntos, el resto de integrantes de la plantilla estuvieron a un nivel mucho más pobre. Es cierto que las ausencias de Serge Ibaka y Patrick Beverley dejaron a los angelinos algo más escasos de recursos, pero no termina de servir como justificación para un equipo que, se supone, aspira a todo esta temporada.
Con esta, los Clippers suman 6 derrotas en los últimos 9 partidos, y han pasado de seguir muy de cerca a los Jazz a encontrarse más próximos a la quinta plaza que a la tercera. Veremos si los de Lue son capaces de recuperar sensaciones, ya que la escalada de los Nuggets puede hacerles continuar perdiendo puestos en un Oeste que no espera a nadie.
(Fotografía de portada: Tom Pennington/Getty Images)