Los Memphis Grizzlies cortaron su pequeña racha de derrotas a costa de los Portland Trail Blazers, a quienes vencieron por 92-83 en un partido con un marcador que parece sacado de otra época. El cuadro de Bickerstaff volvió a convertirse en una máquina de triturar ataques del rival, lo cual fue suficiente para sobrevivir a una noche desacertada de Marc Gasol y mantener el sexto puesto del Este. Portland, por su parte, sigue siendo incapaz de poner fin a su mal momento, y cae al noveno puesto tras la victoria de Sacramento.
Los 83 puntos de los Blazers suponen la marca más baja de los de Oregón en lo que va de temporada, con una importante diferencia con respecto a la segunda (96). No es de extrañar que esto ocurriera ante Memphis, una de las mejores defensas del campeonato, que dejó a los de Stotts en un paupérrimo 36,8% de acierto (27,3% en triples). La de anoche fue la sexta vez en lo que va de curso que los Grizzlies no permiten a su rival anotar más de 90 puntos, y todas ellas se han saldo con victoria para el cuadro de Tennessee.
McCollum vale por medio equipo
El dato anotador de Portland resulta incluso más llamativo al ver que C.J. McCollum fue autor de 40 puntos, casi la mitad del total. El escolta brilló en solitario en un panorama desolador, e incluso logró comandar un buen inicio de los suyos, que llegaron a mandar por 11 puntos al final del primer cuarto, pero los apoyos nunca llegaron. Ni siquiera Damian Lillard estuvo a la altura, pues, pese a sus 14 puntos, sumó tantos tiros anotados como balones perdidos (4), y acabó con un 22,2% de acierto en sus lanzamientos.
El choque evidenció los ya conocidos problemas de los Blazers para encontrar puntos más allá de sus dos estrellas. Jusuf Nurkic, tercer espada del equipo, no pudo pasar de los 2 puntos, y el acierto a nivel general brilló por su ausencia.
Conley y Jackson deciden
Con todo, tampoco fue un gran partido de Memphis a nivel ofensivo. Marc Gasol se quedó en 9 puntos con 4/15 en tiro, aunque lo compensó con 7 rebotes, 5 asistencias y 6 tapones, y hombres como Shelvin Mack o Garrett Temple tuvieron una noche bastante desacertada. Esto llevó a que, mediado el último cuarto, el duelo estuviera en un puño con el 79-78 campando en el marcador.
Fue entonces cuando Mike Conley y Jaren Jackson Jr. emergieron para poner un punto y final relativamente plácido al encuentro. Entre los dos se encargaron de protagonizar un parcial de 13-0 en 3 minutos que rompió el partido por completo, y que les permitió acabar con 23 y 14 puntos respectivamente. No es la primera vez que ambos jugadores aparecen en los compases decisivos, y, con suerte para los Grizzlies, no será la última.
(Fotografía: Matthew Stockman/Getty Images)