El encuentro entre Celtics y Spurs dejó un momento de los que nunca gusta ver en un partido. Tras la expulsión de Kemba Walker, uno de los asistentes al TD Garden arrojó una lata de cerveza a la pista como señal de su descontento, la cual estuvo cerca de golpear a algunos integrantes del banquillo visitante. El autor fue rápidamente identificado y expulsado del recinto.
«Casi me da. Pasó sobre Marco (Bellineli) y sobre mí y cayó en la pista» afirmó Bryn Forbes. «No sé ni siquiera por qué tenían latas de cerveza. Es una de las cosas más estúpidas del mundo».
Por su parte, Lonnie Walker quiso quitar hierro al asunto dadas sus nulas consecuencias. «Son cosas que pasan. Es decir, son aficionados y no puedes controlar lo que hacen. Simplemente hay que agradecer que no le haya pasado nada a nadie».
Con todo, Brad Stevens optó por pedir disculpas por lo sucedido: «Supongo que los Celtics ya lo habrán hecho, pero quiero pedir perdón a los Spurs por lo ocurrido en la grada. Ya le he dicho a Popovich al terminar que lamento que hayan tenido que pasar por esto, y espero que no se permita al autor volver a entrar al pabellón».
(Fotografía de portada: Maddie Meyer/Getty Images)