La noche soñada por los Nuggets llegó. Sí, hace meses que se proclamaron campeones de la NBA, pero como en tradición no fue hasta esta pasada madrugada, con el partido inaugural de la temporada, cuando vieron cómo les entregaban los anillos que les distinguen como los mejores del curso 2022-23, y cómo se alzaba hacia lo alto del pabellón esa bandera que les recordará cada vez que estén en el mismo que hicieron historia, que tocaron la gloria.
Fue un momento emotivo, uno que quedará para el recuerdo de todos y que fue preludio del triunfo ante Lakers. Nikola Jokic, gran artífice de este éxito sin precedentes en Denver no podía dejar de mirar su anillo ni de sonreír ante cada vez que la cámara le enfocaba. La organización de Colorado ha tardado 47 años en lograr lo que todos desean, pero tienen claro que no quieren volver a esperar tanto. «El año pasado fue increíble. Tenemos un anillo. ¿Quién quiere otro? Vamos a buscarlo», comentaba Michael Malone, head coach del equipo, a los aficionados.
Para una fiesta sin igual en Denver, estuvo presente el comisionado de la NBA, Adam Silver, el dueño del equipo, Stan Kroenke, y el presidente del mismo, Josh Kroenke, quien fue el encargado de llevar el Trofeo Larry O’Brien a mitad de cancha para comenzar una ceremonia perfecta; tanto es así que el rival y espectador de la misma era Los Angeles Lakers, justo el equipo al que derrotaron la campaña pasada en las finales de la Conferencia Oeste.
«Esto es lo correcto, ya que la temporada pasada terminó en Denver, tiene sentido que esta temporada comience también en Denver. Gracias por venir y apoyarnos esta noche y durante toda la temporada en nuestro camino para repetir», dijo Aaron Gordon a los presentes.
Un anillo a la altura
Jugador por jugador, los Nuggets entraron a la cancha para recibir los anillos creados en colaboración con Jason de Beverly Hills, que diseña desde hace tiempo estas joyas. Los anillos que recibieron Nikola Jokic, Jamal Murray y el resto de jugadores tenían en un lado escrito «Campeones del Mundo», junto al logo retro de los Nuggets y el récord de la temporada regular (53-29). En el otro lado estaba el nombre del jugador, el número y el mantra de los Nuggets: «Bring it on».
Estas piezas únicas incluían la elevación de Mile High City (5280) y el récord de postemporada en el interior. En el centro del anillo aparece inscrita la palabra «Nuggets» en diamantes amarillos junto con sus icónicos picos. También hay un anillo retráctil oculto que presenta el cartel del campeonato. No extraña que Jokic y compañía no fuesen capaces de quitarle los ojos de encima.
Y victoria contra Lakers
Denver vivió anoche una celebración sin igual, pero ello no quita que sigan siendo un enorme equipo –el actual campeón ni más ni menos–. Para demostrarlo, derrotaron a los Lakers por 119-107 con un triple-doble de Nikola Jokic (29 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias) y dando la sensación de seguir siendo ese equipo tan espectacular como sólido que en junio se coronó campeón de la NBA. Ellos dicen que quieren repetir. Viéndoles jugar anoche no podemos hacer otra cosa que confiar en su palabra. Los Nuggets han retomado su pulso a la competición justo donde lo dejaron.
(Fotografía de Justin Tafoya/Getty Images)