Los Miami Heat confirmaron este miércoles una de las mayores machadas presenciadas en la historia de los playoffs de la NBA. Los de Florida eliminaron a los Milwaukee Bucks, uno de los máximos candidatos al anillo, en primera ronda tras repetir triunfo y cerrar la serie en el quinto partido.
Esta es la sexta vez que un seed 8 elimina al primer clasificado de su conferencia a las primeras de cambio. La particularidad reside en que nunca el equipo eliminado había ganado solo un partido de la serie, lo que amplifica todavía más el fracaso.
Sin duda alguna, el gran protagonista de la serie ha sido Jimmy Butler, quien emergió como el catalizador ofensivo de los Heat y de cada una de las reacciones que se tradujeron en sendas remontadas en los últimos dos duelos. El alero cerró la eliminatoria con unos promedios de 37,6 puntos, un acierto en tiros de campo del 59,7%, 6,0 rebotes, 4,8 asistencias y 1,8 robos.
Los Bucks no encontraron la manera de detener a Butler, pero la sensación interna es de que se pudo hacer algo más para intentarlo. La máxima estrella del equipo, Giannis Antetokounmpo, no tuvo pelos en la lengua a la hora de criticar la falta de ajustes por parte del cuerpo técnico de Mike Budenholzer de cara a tratar de reducir la producción del alero de los Heat.
«Hacer más dos contra uno, intentar que pase el balón. Tal vez cambiar el emparejamiento en momentos para darle un respiro a Jrue [Holiday]. No creo que como equipo hiciéramos el ajuste correcto ni que probáramos tantos ajustes como pudimos haber hecho contra él.»
Budenholzer ya había sido señalado en el pasado por su poca predisposición a la hora de hacer ajustes en postemporada. De hecho, se habló de un ultimátum al técnico el mismo año que, finalmente, los de Wisconsin se alzaron con el campeonato. Así, es muy posible que la gerencia de Milwaukee repita técnica de presión, sino es que opta directamente por prescindir de sus servicios.
(Fotografía de portada de Stacy Revere/Getty Images)