Gestionar los entrenamientos está siendo una de las tareas más complicadas para los preparadores físicos durante este confinamiento. Poseen armas como las videollamadas por Zoom que permiten establecer y seguir rutinas con toda una plantilla a la vez, cada uno evidentemente desde su casa y con el material que tienen a mano por allí. En el caso de los Bucks, Giannis Antetokounmpo tiene en su hogar todo tipo de artilugios para continuar realizando tanto tareas cardiovasculares como otras más destinadas a la fuerza. Sin embargo, le falta algo básico para un jugador de baloncesto: la canasta.
En su domicilio de Wisconsin, el todoterreno griego ha admitido «no tener acceso a una canasta. Un montón de jugadores de la liga tienen canchas en sus patios, pero yo ahora mismo solamente puedo hacer ciertas rutinas físicas. Tengo una bicicleta estática, una cinta para correr, tengo mancuernas y pesos. Me mantengo en forma, pero no puedo jugar al baloncesto».
Giannis explicó también, en declaraciones recogidas por ESPN tras una videollamada grupal con varios jugadores de los Bucks, que la franquicia está realmente atenta al estado de forma físico y mental de sus jugadores, haciéndoles un seguimiento diario y proporcionándoles rutinas para que todos ellos mantengan el tono apropiado y sigan generando adaptaciones como si estuvieran entrenando en las instalaciones deportivas de la franquicia. «Dispongo de bandas de resistencia, de una bicicleta, como decía. El equipo se está preocupando en darnos rutinas que podemos seguir en casa, y también nos ayudan con el tema nutricional. A través de una empresa de catering, nos proporcionan alimentos tanto para nosotros como para nuestras familias. La verdad que estas cosas ayudan mucho. Al tener que estar en casa, también tenemos que preocuparnos de estar en forma, de cuidar nuestro estado físico», esgrimió el jugador.
Middleton, en las mismas
Otro que tiene complicado poder disfrutar del aro es Khris Middleton. El compañero de Giannis también señaló que «no tengo acceso a una cancha de baloncesto a menos que me acerque a la casa de mis vecinos, quienes sí disponen de una. Ahora mismo todo se está centrando en la cinta de correr, la cuerda para saltar, algo de pesas. No mucho más. Tengo un par de balones con los que practicar el manejo, pero no tengo dónde lanzar».
(Fotografía de portada de Harry How/Getty Images).