Antes del encuentro contra los Thunder, y que se saldó con triunfo de San Antonio, Manu Ginóbili llevaba 1.387 robos de balón en la NBA y en los Spurs. Se encontraba el argentino a un solo robo de igualar a David Robinson como el líder en esa clasificación histórica de la franquicia texana y a dos de quedarse al frente del ranking, en solitario.
Y no tardó mucho en conseguirlo, pues antes del descanso Ginóbili ya había amarrado lo que necesitaba para colocarse con 1.389 como el máximo ladrón de la historia de los Spurs. En el global de la NBA, el escolta de San Antonio ocupa la posición número 56 y la número 8 de jugadores en activo, que encabeza Chris Paul (2.006 robos a 30 de marzo de 2018).
Además de en robos, Ginóbili manda en la clasificación de triples anotados de toda la historia de la franquicia, es el tercero con más partidos disputados, el cuarto con más asistencias repartidas o el quinto con más puntos anotados, entre otros logros estadísticos brillantes, construidos a lo largo de las dieciséis temporadas que lleva en San Antonio, con los que ha logrado cuatro anillos de campeón y ha sido dos veces All-Star.