Perder el primer partido de las Finales está lejos de ser el ideal, pero tampoco es para volverse locos. Justo así han tomado los Warriors lo ocurrido en el Game 1 ante Boston. Cayeron tras un demoledor último cuarto en el que encajaron un parcial de 40-16, pero entienden que esto es muy largo y que siguen teniendo la puerta abierta para conseguir el anillo.
«Estaremos bien. Prácticamente dominamos el juego durante los primeros 41 o 42 minutos, así que estaremos bien. Y puedes ver nuestra historia, ya que siempre hemos ganado un partido en la carretera. Entonces, ya sabes, no ha ocurrido nada por lo que debamos entrar en pánico. Se trata del primer equipo que gana cuatro partidos, no del primero que gana uno», expresa Draymond Green.
Por supuesto que Golden State aún puede ser campeón, pero lo tiene más difícil que antes de empezar a jugar. La estadística dice que en un 70,7% de las Finales el anillo de lo llevó el equipo que ganó el primer partido. Para Green nada de esto supone una merma para la confianza del equipo.
“Siempre hemos aceptado los desafíos. Esta situación no es diferente. Afrontaremos este. Así que no, no es un golpe para la confianza en absoluto, ni un poco», afirma.
El técnico de los de San Francisco, Steve Kerr, coincide con Green en que esto es muy largo, por lo que su única preocupación es cómo mejorar en el siguiente partido sin importar lo que haya acaecido con anterioridad.
«Es una serie de siete juegos por una razón. Creo que tienes que darle crédito a Boston. Entraron al partido y se llevaron la victoria. Jugaron un gran último cuarto. Nosotros nos centraremos en ver el vídeo del partido e identificar dónde podemos mejorar. Ya saber, es solo un partido, así que simplemente pasas al siguiente», explica.
(Fotografía de Ezra Shaw/Getty Images)