Desde que en 2004 los Detroit Pistons se proclamaran campeones de la NBA, sus enfrentamientos ante los Utah Jazz se han saldado con un balance 17-3, incluyendo la derrota en la pasada noche en el Pace Auburn Hills por 96-97.
«La forma en la que ganamos este partido fue lo importante», destacó Quin Snyder. «Jugamos muy bien al principio, pero hemos sido capaces de superarlo y salir lejos de ella», agregó.
Gordon Hayward (17 puntos), que solo llegaba al último periodo con solo 6 tantos, lograría en los últimos cinco minutos un total de 11 para aupar a los suyos a la victoria, incluidos dos triples claves.
«Eso demuestra que puede tener un promedio en los tres primeros cuartos y luego aparecer cuando de verdad importa», destacó el técnico de Utah.
Por su parte, el técnico de los Pistons, Stan Van Gundy, cree que los suyos dieron muchas facilidades a Hayward.
«Consiguió algunos tiros difíciles, pero hubo un par de veces que supimos pararles, pero no hicimos lo que se suponía que teníamos que hacer», explicó el entrenador de los Pistons. «Así no se puede ganar», destacó.
Con dos minutos por disputarse, el alero de Utah logró un triple que puso por delante a los 96-94. Tras esta acción, Brandon Jennings intentó un triple que no encontró la red rival, y Hayward volvió a responder con un dos más uno.
En los Jazz, Derrick Favors (16 puntos y 12 rebotes) y Enes Kanter (14 tantos y 11 rechaces)aportaron un doble-doble cada uno y desde la segunda unidad Joe Ingles agregó 10 tantos con un 3/3 en triples.
Por su parte, en los Pistons el máximo exponente fue Brandon Jennings con 23 puntos y 5 asistencias; seguido por Greg Monroe con 19 tantos y 11 rebotes y Andre Drummond con 11 puntos y 18 rebotes, siete de ellos ofensivos.