Gregg Popovich viene a ser al baloncesto lo que el Drago Milenario a la dendrocronología; un espécimen único.
Hace 19 años que Pops se convirtió en el entrenador principal de San Antonio Spurs. Desde entonces ha visto una escena repetirse no pocas veces. Mientras el banquillo tejano iba haciéndose una prolongación de sus doctas posaderas, sus ojos han contemplado como las 29 franquicias restantes aireaban sus cuerpos técnicos una y otra vez en busca del éxito.
Cambios, muchos cambios. Marc Stein, de ESPN, nos revela que hasta 221 permutas se han sucedido en los banquillos desde que el dueño y señor de la pizarra spur se posicionara al mando en la temporada 1996-97.
Bajo sus hilos, los tejanos se atragantan a honores. Menudo titiritero eligieron para acabar el siglo. Desde su llegada, los Spurs han sido 6 veces Campeones de la Conferencia Oeste y hasta en 5 ocasiones se han alzado con el anillo. A título individual, Coach Pop presume de tres galardones de Entrenador del Año así como postulado otras tres veces para representar al Oeste desde la banda en el All-Star.
Esta noche, sus chicos —sin Tim Duncan por molestias—, se enfrentan a Golden State Warriors en el partido de los partidos. Un enfrentamiento más, no obstante, para el mandamás de las rotaciones.
Tras ese fabuloso encuentro los Spurs seguirán como si nada; acechando de cerca y en silencio a los de Bahía Blanca en la mejor temporada de su historia mientras ellos acumulan rutina; mientras Pops rumia la jugada, sin reivindicar atención, esperando siempre al flop, en mayo, donde como viene haciendo desde hace casi dos décadas, darle la vuelta a sus cartas y mostrarnos, otra vez, sólo figuras y ases.
Mientras, los demás, seguirán buscando otro clon suyo capaz de gestionar estrellas y secundarios como nadie.
Una veintena de años de estabilidad. En la orilla opuesta, donde la mar está picada, Nets, Kings y Magic se ubican como las franquicias que más trueques han hecho en sus banquillos, con 11 cada uno.
