Ver jugar a los actuales Pacers es un auténtico espectáculo. Con Tyrese Haliburton a los mandos, Indiana se ha convertido de largo en el equipo que más anota de la NBA con 126 puntos por noche, algo que han conseguido a través de un juego veloz que a su vez les está llevando a sumar victorias; tanto es así que ocupan la tercera plaza de la Conferencia Este con 6-4.
Indiana tiene muy buena pinta. Con Haliburton camino de incluso estar en la discusión por el MVP –promediar 23,8 puntos, 12,2 asistencias y 3,9 rebotes así lo exige–, otros jugadores como Bennedict Mathurin o el propio Bruce Brown señalan un presente y futuro prometedor. Así lo sienten en Indianapolis, pero no por ello tienen intención de conformarse, y es que su jugador franquicia ya habla de los importante que puede ser él mismo de cara a atraer otros jugadores al equipo.
«Juego un estilo de baloncesto que la gente quiere jugar. Creo que esa es parte de la razón por la que me firmaron ese acuerdo (cinco años por el máximo). Aporto estabilidad a largo plazo porque saben que puedo ayudar a traer gente aquí, no sólo con quién soy como jugador de baloncesto, sino también con quién soy como persona», comenta a Rob Mahoney de The Ringer.
Desconociendo hasta qué punto tiene amistad o influencia en otros jugadores, la realidad es que su baloncesto es sin duda atrayente. Cuando los Pacers le firmaron un contrato de cinco años que puede llegar a los 260 millones de dólares, es obvio que sabían muy bien lo que hacían. Con Haliburton al frente, será mucho más sencillo tener un equipo ganador hoy (y mañana).
(Fotografía de Tim Nwachukwu/Getty Images)