Si alguien esperaba otra batalla de testosterona e igualdad entre Rockets y Clippers habrá quedado decepcionado. Con un primer cuarto incontestable, Houston dejó encarrilado un partido que terminó ganando por 105 a 92 y en el que su rival no se pudo acercar a menos de 8 puntos.
Los primeros 12 minutos de encuentro se saldaron con un resultado de 34 a 12 que ya ponía a los Clippers en algo más que un aviso: la noche iba a ser un dolor para ellos 24 horas después de haber jugado en Denver. 17 tiros errados y 11 balones perdidos fue el bagaje para los de Doc Rivers hasta ese momento.
James Harden, como no, fue el catapultador de un ataque despiadado con precisión de cirujano que no tuvo problemas en diseccionar la defensa de los californianos. El candidato al MVP sumó 17 de sus 25 puntos totales en el primer cuarto.
Precisamente Harden fue el responsable del gran movimiento de la noche —y de toda la jornada de la NBA— en el periodo inicial. En un ataque contra Wes Johnson, Harden rompió literalmente a su defensor hasta hacerle torcerse el tobillo y caer al suelo, momento que el jugador de los Rockets aprovechó para mirar lo que había ocurrido, soltar el balón de una mano, volverse a cuadrar y encestar un triple limpio para poner el 31-7 en el marcador. La locura. Compañeros y público entraron en extasis y los memes en Internet comenzaron a correr como la pólvora.
JEEZ, @JHarden13!!! ? pic.twitter.com/gfPEywlOw9
— Bleacher Report (@BleacherReport) 1 de marzo de 2018
Pero Harden no estuvo solo. Eric Gordon regresó tras dos semanas ausente y sumó 22 puntos, los mismos que Clint Capela, quien también añadió a su hoja de servicios 14 rebotes y 2 robos. Chris Paul tuvo una noche errática en el tiro y se quedó en 8 puntos y 8 asistencias, pero el mejor dato +/- de los 22 hombres que pisaron la pista fue para él: +21. Por los Clippers el máximo anotador fue Tobias Harris con 24 puntos, seguido de Montreal Harrell con 22. Milos Teodosic y Lou Williams lograron 13 tantos cada uno.
Una racha tremenda
Los Rockets sumaron su 14º triunfo seguido, lo que les permite elevar su marca hasta las 48 victorias, suficientes para liderar la NBA con medio partido de diferencia sobre Golden State. De acuerdo a ESPN Stats, los Rockets son el sexto equipo de la historia de la NBA que suma dos rachas de al menos 14 triunfos seguidos en una misma temporada.