Llegó su máximo de la temporada justo cuando los Heat parecía que continuarían su racha de triunfos.
Durante la victoria que Utah cosechó ante Miami por 98-83, Gordon Hayward logró 34 puntos, de los cuales 18 fueron en el tercer cuarto. Lo más complicado tras el partido suele ser explicar cómo te ves en círculo anotador tan prolífico como el que se encontró él, pero tiró de sencillez para expresar lo que sintió en cancha:
«Vi que me entraron un par de tiros, la canasta se abrió para mí y vi que podía conseguir algo más«.
Lógicamente Quin Snyder estaba más que contento por la actuación de su pupilo, señalando que esto va a servir para que el resto de sus compañeros se contagien de cara a los siguientes e importantes duelos que tienen a la vista.
«Hoy ha sido una muy buena victoria para el equipo», dijo el técnico de los Jazz. «Lo hemos hecho lo mejor que hemos podido al lidiar con lesiones, la fatiga de los back-to-backs y tener que jugar con esas adversidades. He tratado de mantener la fuerza de nuestro grupo y evitar que esas cosas no afectasen».
Mal segundo periodo para Miami
No salieron las cosas como Erik Spoelstra hubiera deseado.
Fue acabar el descanso, y el equipo que volvió a la cancha no se parecía al de la primera mitad. Un 30,4% de acierto en el lanzamiento fue el resultado que los de Floridad acumularon entre tercer y último cuarto, algo que les impidió dar más guerra en la fase final del encuentro.
Chris Bosh fue el más destacado en la anotación de Miami gracias a sus 24 puntos, mientras que Goran Dragic añadiría 16. Dwyane Wade estuvo realmente negado de cara al aro, finalizando con un paupérrimo 3 de 17 en tiros.