Todo el mundo da su paso por el Madison Square Garden, finiquitado. No haber recuperado al Rose MVP y haber visto como, un año más, su equipo, los New York Knicks, se quedan sin playoffs, les empuja a cortar cabezas; y la del point guard es la primera en rodar. Pero hay uno —uno importante— que no lo tiene tan claro. Y ése es su entrenador, Jeff Hornacek.
Antes recordar que Derrick Rose se lesionó el menisco el pasado 2 de abril, dando por finalizada su temporada singular. Los Knicks ya han anunciado su tiempo estimado de recuperación. Se pronostica que en un lapso de entre 3 y 6 semanas esté en condiciones de volver a jugar al baloncesto.
Rodillas muy castigadas
Cuarta lesión en sus rodillas; en esta ocasión en la izquierda, la misma en la que sufrió en 2012 el varapalo físico más severo de su carrera, donde su ligamento cruzado dijo basta… y nunca desde entonces volvió a ser el que durante muchos años fue.
No obstante, por debajo del nivel MVP, hay muchos niveles altamente aprovechables. Justo por debajo del dicho nivel está la categoría de aquellos nombres que en algún momento se susurran como candidatos a pelearlo; ahí tampoco está ya Rose.
Luego está el nivel All-Star. Jugadores de temporada sobresaliente y entre lo más excelso de la liga como para disfrutar del partido de las estrellas. Rose tampoco ha entrado ahí este año… pero ha estado cerca. Quién sabe si el curso que viene podría ser el de la re-consolidación.
Rendimiento 2016/17
El base que en 2011 se colara entre los cuatro MVP’s de LeBron James para quedarse con el suyo particular, ha cuajado una temporada personal interesante, tanto en números como en sensaciones. El que lo ve, entrena y dirige en cada partido, en cada entrenamiento, es muy consciente de ello.
“Derrick ha hecho un montón de cosas buenas para el equipo este año, con la forma en que puede romper la defensa. A medida que avanzaba la temporada, se sentía más cómodo en ataque. Es una lástima que tenga que pasar por otra cirugía. Estoy seguro de que volverá fuerte de ella. Trabajó duro el verano pasado en el verano para conseguir empezar el curso en buena forma. Estoy seguro de que lo hará de nuevo. Le echaremos un vistazo y veremos si podemos traerlo de vuelta“, ha dicho Hornacek en declaraciones recogidas por Yahoo! Sports.
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En cuanto a su hoja estadística, en 64 partidos, Rose ha firmado 18 puntos, 4,4 asistencias, 3,8 rebotes y 0,7 robos; su acierto de cara al aro ha sido de un 47,1% en tiros de campo y un 21,7% (el peor de su carrera) desde el triple. Todo ello en 32,5 minutos de media.
Nuevo contrato
Recordemos que el base fue traspasado de Bulls a Knicks con poco más de un año de contrato. Este curso ha cobrado 21,32 millones de dólares, rubricando la última etapa de un acuerdo de cinco años y 94 millones de dólares. Este Iguazú económico está a punto de terminar.
Ahí residirá la clave de que Rose pueda (si es que es ése su deseo) repetir con los Knicks: pretensiones tanto económicas como deportivas. ¿Estará dispuesto a aceptar una bajada muy considerable en sus emolumentos? ¿Valoraría no ser el base titular indiscutible y poder jugar un rol más secundario respecto al actual? Y un último interrogante pero por ello menos importante… está en condiciones de mejorar lo presente y acercarse (por edad aún está a tiempo) a su bestial versión de hace seis años?
Los destellos los mantiene. Los «¡Ohhh!» y los saltos en los asientos de los fans, aún los logra en pinceladas. De volver a convertir esto en algo habitual y de lograr contagiar de ello al equipo… y de convencer al general manager de turno de que es capaz de hacerlo —Phil Jackson, duro hueso— dependerá mucho su próxima cruzada.